Más de un millón de venezolanos han votado en la consulta popular contra el proceso constituyente impuesto por Nicolás Maduro, según los primeros datos aportados por la oposición.
Una votación que se realiza con calma y alegría cuando se cumplen 107 días de la ola de protestas antigubernamentales. Los votantes están acudiendo de forma masiva, muchos de ellos vestidos con los tres colores de la bandera nacional o con el blanco que representa la paz, a los más de 2.000 puntos "soberanos" instalados por la oposición en todo el país.
"Estamos haciendo historia", proclamó orgulloso Julio Borges, presidente de un Parlamento que se ha convertido en el principal bastión de la consulta, seguido muy de cerca por la Iglesia Católica, que ha aportado parte de sus centros para las urnas. "Marcará un antes y un después. Hoy como nunca vamos a demostrar al mundo entero y a quienes tienen el poder que el pueblo venezolano es el dueño de su destino", agregó Borges.
"La organización y activación de la ciudadanía es impresionante dentro y fuera del país", acotó el jesuita José Virtuoso, rector de la Universidad Católica Andrés Bello y uno de los garantes del proceso.
La votación marcha con fluidez y sólo se han producido incidentes de menor importancia en el centro del país. En Cojedes, un camión municipal vertió aguas negras en el punto de votación.
Nicolás Maduro hizo un llamado anoche a que los actos políticos de hoy se realizaran en paz. El chavismo también celebra hoy un simulacro de los comicios para la Asamblea Nacional Constituyente, previstos para el día 30.
El presidente desdeñó la consulta, pese a que está aprobada por la Asamblea Nacional, calificándola como un acto interno de la oposición. No piensa lo mismo Gabriela Ramírez, que fuera su Defensora del Pueblo. "El pueblo venezolano transmite este domingo su apego a la movilización pacífica y el deseo urgente de opinar políticamente. La misión del poder es mandar obedeciendo y procesar que no pueden torcerse las reglas del juego en beneficio propio", acusó. Hoy también se espera el voto de Luisa Ortega, la fiscal rebelde.
Finalmente la censura gubernamental no pudo ponerle rejas a la marea democrática. Miles y miles de personas siguen votando a esta hora por todo el país. Entre ellos, Aracelys Fiallo, de 18 años, violinista del Sistema de Orquestas. La joven votó el "Sí/Sí/Sí" a las tres preguntas del plebiscito y lo hizo con su música, junto a dos mujeres. Violín, cuatro y maracas para la fiesta democrática del día.
La gente, emocionada, entre lágrimas y llantos, comenzó a gritar las mismas consignas ("¿Quiénes somos? Venezuela. ¿Qué queremos? Libertad") que resuenan desde hace 107 días, cuando se iniciase la ola de protestas antigubernamentales.
"Somos mayoría, ésta es la manera más democrática de participar. Jamás he dudado de que hoy iba a votar", detalló la violinista a EL MUNDO.
Fuente: El Mundo
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