Ante la situación anómala que viven los mercados y los distintos entes bursátiles muchos políticos han acudido a atacar al "1%" maléfico que "corroe" nuestro país. Yo no juego al gusto de los oligarcas y los corruptos, pero permítanme decirles queridos politiqueros que como pirañas en el fondo del mar, en busca de oxígeno (votos), ese 1% tan diabólico paga el 46% del total de impuestos que recauda el gobierno federal en este país.
Es más, en su hermoso bastión liberal llamado California (territorio que si fuera independiente tuviera la novena economía más grande del mundo; tan sólo detrás de Brasil), allí el 90% de todos los impuestos que se recaudan en el estado son pagados por ese famoso "1%". Al parecer el teatro de "liberales y hippies humildes" que solo apelan a los sentimientos a la hora de hacer política se les cayó.
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